Descarga eléctrica que pone en peligro su vida: un hombre cae después de subir a un tren en Munich

Descarga eléctrica que pone en peligro su vida: un hombre cae después de subir a un tren en Munich

El 10 de agosto se produjo un grave accidente en el patio de clasificación norte de Múnich, que volvió a llamar la atención sobre los peligros que rodean a los sistemas ferroviarios. Un hombre de 30 años de Ottobrunn, que había consumido alcohol con dos acompañantes, subió a un tren de mercancías estacionado y sufrió una descarga eléctrica que puso en peligro su vida. Se acercó demasiado a la línea aérea de 15.000 voltios y cayó al suelo desde una altura de unos cuatro metros. Se sospecha que la descarga eléctrica se produjo debido a la proximidad a la línea aérea. Pero aún no está claro si realmente tocó la línea aérea: la investigación de la policía federal aún está en curso. Este informó sobre el incidente, que también puso de relieve la situación de seguridad en las instalaciones ferroviarias.

El hombre no sólo sufrió graves quemaduras de segundo a tercer grado en el 40 por ciento de la superficie de su cuerpo, sino que también se rompió la clavícula. Sus compañeros, un joven de 24 años de Untermenzing y un hombre de 33 de Dresde, prestaron inmediatamente los primeros auxilios hasta que llegaron los servicios de emergencia. El herido fue trasladado inmediatamente al hospital porque pasó de un shock a otro tras este incidente. Sus objetos personales, como su teléfono móvil y gafas, también sufrieron importantes daños en la caída.

Una velada amistosa se convierte en una pesadilla

El accidente ocurrió alrededor de las 4:30 a.m. del domingo por la noche cuando los tres hombres querían disfrutar de su tiempo de fiesta. El acercamiento no autorizado a las instalaciones ferroviarias fue un error peligroso. La policía federal advierte con razón: subirse a vagones o acercarse a líneas aéreas puede tener consecuencias fatales. La electricidad puede saltar por el aire a una distancia de tan solo 1,5 metros, según un comunicado oficial de la Policía Federal y Deutsche Bahn. Esto no debe subestimarse, porque por estos cables aéreos fluyen 15.000 voltios, es decir, 65 veces el voltaje de un enchufe doméstico normal.

Los incidentes no son sólo una cuestión de precaución, sino también de responsabilidad legal. Según informes de la policía federal, el herido está siendo denunciado por interferir peligrosamente en el tráfico ferroviario. Esto no sólo tiene consecuencias personales para él, sino también la posibilidad de un litigio. Los daños a la línea aérea afectada por el incidente se estiman en unos 5.000 euros.

Sigue prohibido acceder a las instalaciones ferroviarias, así como volar cometas, drones o aeromodelos cerca de las vías. Estas actividades no sólo son riesgosas sino que también pueden provocar otros accidentes. Por ello, Deutsche Bahn y la Policía Federal han lanzado la campaña de seguridad “Queremos que llegue sano y salvo”. Se proporciona un vídeo de apoyo para llamar la atención sobre los peligros. Como demuestra la experiencia, este tipo de accidentes suelen tener consecuencias graves o incluso mortales. Cualquiera que actúe en territorio no autorizado se juega la vida.

En resumen, este incidente exige una vez más a todas las partes interesadas que se tomen en serio los peligros asociados a las instalaciones ferroviarias. La presentación de informes a través de Rosenheim24 y alemanes del sur ilustra la importancia que tienen la educación y la prevención en este ámbito. Todo el mundo debe ser consciente de los riesgos y evitar estos lugares para no poner en peligro su propia seguridad y la de los demás.

Para obtener más información sobre los peligros de la alta tensión en los sistemas ferroviarios, visite el sitio web ferrocarriles alemanes.