Milagro de integración en Múnich: ¡los refugiados conquistan el mercado laboral!
Munich promueve la integración de los refugiados a través de cursos de idiomas y aprendizaje. Historias de éxito y desafíos en foco.

Milagro de integración en Múnich: ¡los refugiados conquistan el mercado laboral!
En Múnich existen numerosas historias de refugiados que lograron integrarse con éxito en la sociedad. Un ejemplo de ello es el nigeriano Monday Ndubuisi, de 43 años, que llegó a Alemania en 2015. Su solicitud de asilo fue tramitada por la Oficina Federal de Migración y Refugiados (BAMF) durante seis años. Aprovechó este largo tiempo de espera para aprender alemán de forma intensiva. Participó en cursos de idiomas, realizó prácticas y en 2018 encontró un puesto permanente en el Freisinger Hof de Múnich. Periódico del sur de Alemania informó.
Aunque su solicitud de asilo fue rechazada en 2021, Ndubuisi no se desanimó. Lo animaron a empezar a formarse en la hostelería para poder seguir siendo una “persona tolerada”. Lo completó con éxito y ahora trabaja como especialista en catering. “Quiero quedarme en Múnich y aportar algo”, así describe su motivación. La política de integración urbana, que se aplica independientemente de la perspectiva de permanencia, está dando sus primeros éxitos, explicó la responsable de Asuntos Sociales Dorothee Schiwy (SPD).
Medidas de integración en la ciudad
La ciudad de Múnich ofrece diversas medidas de integración. Este año están disponibles alrededor de 1.700 plazas para distintos cursos de idiomas y el presupuesto de la ciudad destina anualmente 9,5 millones de euros a medidas de integración, incluidos dos millones de euros para cursos de idiomas. En agosto de 2023 quedaban vacantes 2.000 puestos de formación en Múnich, lo que abre oportunidades para muchos refugiados motivados. El año pasado, 443 personas con antecedentes de refugiados firmaron un contrato de formación con la IHK y la Cámara de Artesanía.
Otra historia de éxito es la de Beatrice Nanvubya, de Uganda, de 31 años, que llegó a Alemania en 2020 y completó su formación como asistente dental. Actualmente se encuentra de baja por paternidad y está realizando un curso de alemán para prepararse para su vuelta al trabajo. "Aproximadamente dos tercios de los refugiados que llegaron en 2015 encontraron trabajo", según las autoridades de la ciudad. La tasa de éxito de los cursos de idiomas se sitúa entre el 60 y el 90 por ciento, lo que habla de la eficacia de las ofertas de integración.
Desafíos actuales y apoyo
Sin embargo, también hay desafíos que superar. En junio de 2025 se registraron en Múnich unos 10.000 refugiados y en agosto la agencia de empleo registró más de 5.700 “desempleados en el contexto de la migración de refugiados”. Mohammed Sharif Ziaie, de Afganistán, de 27 años, es un ejemplo de rápida integración: llegó a Alemania en 2023, trabajó como conserje y barista y comenzó a formarse como oficinista después de que se aceptara su solicitud de asilo en abril de 2025. Sin embargo, esperó mucho tiempo para conseguir una plaza en el curso de integración de la BAMF.
El acceso a cursos de integración es de gran importancia para muchos solicitantes de asilo y personas toleradas. Según el BAMF-Website Tanto los solicitantes de asilo con permiso de residencia como las personas toleradas tienen la oportunidad de participar en cursos de integración y de idiomas. Estos programas son gratuitos, pero existe mucha presión para registrarse rápidamente si es necesario participar.
En general, se puede ver que en Múnich se aplica una política activa de integración que facilita la llegada de los refugiados. Las experiencias de personas como Monday Ndubuisi son una fuente de esperanza y demuestran que con el apoyo adecuado la integración puede tener éxito, fiel al lema: "Juntos somos fuertes en Munich".